Mónica Rouanet

    Mónica Rouanet

    Nací en Alicante en 1970 y durante los primeros años de mi vida viví en diferentes lugares, aunque sentía mi hogar en Altea (Alicante). Es donde estaba la casa a la que siempre volvíamos. Actualmente resido en Madrid. Desde niña no he podido dejar de mirarlo todo, de imaginar historias para cada cosa que veo y de dejarlas por escrito. Cuando cumplí diez años, mis madres empezaron a preocuparse seriamente por mí. Todos los días, al ir andando por la calle, me caía al suelo. El médico les dijo que no me pasaba nada grave, que mi vista era buena, mi oído también, y lo mismo pasaba con mi aparato locomotor. «¡Han tenido ustedes una hija despistada, así de simple!». Lo que ellos no sabían era que para mí era (y es) imposible caminar por la calle y no mirar por las ventanas de los edificios que voy dejando atrás. Desde abajo alcanzo solo a ver muy poco; con suerte puedo apreciar un techo con alguna lámpara, el color de las paredes, un cuadro, unas cortinas… Eso me basta. Con eso puedo imaginar la vida de los que han hecho de ese espacio su refugio. Algunas de esas historias son tan bonitas, o tan raras, o tan interesantes, que no quiero olvidarlas.

    Por eso escribo, porque no quiero que los millones de historias que invento cada día, caigan en el olvido.